La cláusula REDAL frente a embargos

La compra de viviendas se ha convertido en un tema que genera cierta incertidumbre a quien se atreve a dar el gran paso. Esta inversión económica está cada vez menos al alcance de los bolsillos de las economías domésticas en España y se complica con la subida de los tipos de interés que encarecen los préstamos hipotecarios.

Una de las opciones a las que acuden las familias que desean adquirir una vivienda es la cláusula REDAL, como medida para frenar el embargo ante posibles situaciones de imposibilidad de hacer frente a las cuotas.

¿Qué es la cláusula REDAL?

La cláusula REDAL es una construcción doctrinal que, en un sentido amplio, significa voluntad de devolución. Esta cláusula no es hipotecaria, pero es una medida a la que se puede acudir para negociar la devolución de la hipoteca en cantidades menores a las acordadas en el contrato. Generalmente, la cláusula REDAL alude al tiempo durante el cual persistan los problemas económicos de los titulares de la hipoteca.

No obstante, al no tratarse de una condición hipotecaria, no existe normativa común al respecto de la cláusula REDAL.

¿Cómo saber si mi hipoteca es REDAL?

Es posible que, leyendo este post, te preguntes si tu hipoteca es REDAL y cómo saberlo. Una manera de interpretarlo es cuando no queda clara la forma de amortizar el préstamo o la cantidad a pagar en cada cuota. Si el titular de la hipoteca no conoce con claridad lo que le corresponde pagar cada mes o cuál es el plazo de amortización, puede acudir a la cláusula REDAL.

Si estás en una situación similar y consideras que no estás plenamente informado de las condiciones de tu hipoteca, será un juez quien determine la cláusula REDAL del préstamo para evitar un posible embargo. Las medidas judiciales varían en función de cada caso particular, pero es posible que el juez impida que se acepte la liquidación del saldo que presenta el banco, debido a que la cantidad exigida no se recoge con claridad en el contrato de la hipoteca.

Sentencias cláusula REDAL en España

Actualmente, con la crecida subida del Euríbor y, por consecuencia, de los desahucios, ya existen varias sentencias de Audiencias Provinciales sobre la cláusula REDAL. Sin embargo, no hay jurisprudencia del Tribunal Supremo al respecto.